San Nicolás de Bujaruelo – Valle de Bujaruelo – Valle de Otal – Refugio de Otal – Cascada de Otal
Iniciamos la senda circular que se dirige por las cercanías del Valle de Bujaruelo y que es muy frecuentada por turistas de la zona. Al principio podemos visualizar un cartel informativo que nos explicará todas las posibilidades de flora y fauna que podemos encontrar en la zona.
La ruta comienza cruzando el Puente románico de San Nicolás de Bujaruelo, un precioso puente sobre el Río Ara. Tras cruzar el puente, nos desviamos a la izquierda, donde encontraremos otro cartel informativo y donde nos adentraremos en una zona preciosa, muy bonita: el Fenal!
El Fenal es un lugar espectacular, lleno de praderas, pequeños senderos, vegetación y ríos y arroyos que dan vida al lugar. Es un sitio encantador y muy agradable de pasear, sin dificultades ni desniveles.
Tras superar los primeros metros, cruzamos el Barranco de Sandaruelo, primero por un puente metálico y luego a lo largo de dos grandes troncos colocados de orilla a orilla. Sin duda, un momento divertido!
Seguimos nuestra ruta y nos adentramos en las Praderas de Laña Larga, otro lugar para enmarcar, precioso, de grandes praderas verdes y con unas vistas excepcionales. Otro lugar para pararse y disfrutar… Por las inmediaciones de las Praderas de Laña Larga encontramos otro cartel informativo.
Continuamos nuestra jornada rumbo al Puente de Oncins, al que llegamos después de tomar un desvío. El Puente de Oncins nos ofrece la posibilidad de cruzar el Río Ara para adentrarnos en la otra ribera del río, por la que regresaremos a la vuelta.
Seguimos varios metros más y llegamos al cruce en el que nos desviaremos hacia el Valle de Otal y donde podremos llenar nuestras cantimploras, gracias a la Fuente de la Femalla.
A partir de aquí, la ruta cambia considerablemente, La belleza del lugar visitado hasta ahora va cambiando por una pista forestal por la que iremos ganando altura a lo largo de varias curvas. La pista forestal no ofrece ningún tipo de dificultad y nos va regalando hermosas vistas de todo lo que tenemos a nuestro alrededor, también de una enorme y vertical cascada que visualizamos gracias a la época en la que nos encontramos. Sin duda, esta parte será la más exigente de la jornada.
Tras superar la zona de curvas, llegamos a uno de los puntos más altos de la ruta, el Collado de Otal, donde superaremos una valla y donde obtendremos unas preciosas vistas del Valle de Otal, un valle de origen glaciar y mucho más abierto que el cercano Valle de Bujaruelo. Tiempo para descansar y tomar un respiro, antes de adentrarnos en el valle.
Tras el merecido descanso, remontamos el Valle de Otal a lo largo del Río Otal, primero por un pequeño puente y luego a lo largo de la pista forestal por la que avanza el valle. Adentrados en él, las vistas son espectaculares. Aún se divisa bastante nieve en las pindias laderas, y el contraste entre el blanco de la nieve y el verde de las praderas hacen que el lugar sea realmente bonito.
Continuamos por la pista forestal, casi siempre pisando nieve, y llegamos al Refugio de Otal, situado al final del valle.
Seguimos un poco más allá y llegamos al lugar más espectacular de la jornada, la Cascada de Otal, una enorme cascada, situada al final del valle y con la que el Barranco de la Paúl y el Río Otal salvan unos cuantos metros. Tiempo para descansar y refrescarnos.
Visitada la Cascada de Otal situada al final del valle, decidimos remontarla para continuar un poco más allá del Valle de Otal. La senda se dirige al Collado Tendeñera, pero nosotros tan sólo avanzaremos varios metros más para visualizar la parte más alta de la cascada que nos ocupa y un par de saltos de agua más, fruto del deshielo que estaba sufriendo la zona.
El regreso lo realizaremos por el mismo camino de ida hasta la Fuente de la Femalla, lugar donde nos desviamos hacia el Valle de Otal. Primero recorremos dicho valle y luego descenderemos hacia el Valle de Bujaruelo por la cómoda pista forestal.
Ya en la Fuente de la Femalla, en vez de dirigirnos hacia el Puente de Oncins, regresaremos a San Nicolás de Bujaruelo por el otro margen del Río Ara. Por la pista de regreso, ancha y sin pérdida, obtenemos preciosas vistas de las Praderas de Laña Larga y el Fenal. También visualizamos a lo lejos un bonito salto de agua. En pocos minutos, llegamos nuevamente a San Nicolás de Bujaruelo, donde daremos por concluida esta bonita jornada.
Preciosa ruta y hermosos valles. Contraste entre el bonito y encajonado Valle de Bujaruelo y el espectacular y de origen glaciar Valle de Otal. Una ruta totalmente recomendada y apta para todos los públicos! Increíble la Cascada de Otal que se encuentra al final del Valle de Otal. Merece la pena llegar hasta aquí!
Tipo: Senderismo
Fecha: 9 de Abril de 2017
Duración: 5 h. 52 min.
Dificultad: Fácil
Distancia: 15,78 km.
Circular: Sí
Desnivel acumulado: 408 m.
Altura mínima: 1.331 m.
Altura máxima: 1.738 m.
Salsaludos, abrazos y besines!
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