Tonín de Arbas – Estorbín de Valverde (2.123 m)
En la Cordillera Cantábrica existen multitud de cimas de más de 2.000 metros y que no superan los 2.200 metros. Para buscar mayores altitudes hay que irse al Macizo de Ubiña o a zonas más orientales, Picos de Europa, Montaña Palentina, etc. Una de esas cimas es el Estorbín de Valverde (2.123 m), la cumbre más emblemática de la Sierra del Cuadro y techo del concejo de Aller (Asturias). Una montaña que conserva sus laderas blancas durante la primavera y que sirve perfectamente para disfrutar de la nieve!
Inicio
Existen muchas opciones para subir al Estorbín de Valverde, aunque nosotros elegiremos la más directa, ubicada en León y que comienza en el pequeño pueblo de Tonín de Arbas. Recorremos el pueblo hasta el final, dejando el coche en una de las partes más anchas de la calle central.
Descripción
Desde el propio pueblo ya podemos hacernos una idea de la ruta que completaremos, recorriendo el bonito valle que forma el Arroyo Valle del Cuadro. Hacemos la mochila con todo tipo de material invernal, pues no sabemos cómo vamos a encontrar la nieve. Con todo listo, iniciamos la marcha a lo largo del pueblo, dirección al valle. Una fuente nos permite rellenar nuestras cantimploras!
Un primer puente nos indica que iniciamos el recorrido a lo largo del valle, dejando atrás Tonín de Arbas. La ruta no tiene demasiada pérdida, pues siempre tendremos el nevado Estorbín de Valverde al fondo.
El Arroyo Valle del Cuadro, en esta época, es un espectáculo para la vista! Comenzamos a ver las primeras cascadas, fruto del deshielo del momento. Es posible que en época estival no tengamos tal belleza.
Continuamos la ruta a lo largo del valle, en ligero ascenso, y siguiendo un primer desvío hacia la derecha.
Seguimos, aún con las primeras luces del día asomando, y cruzamos el Barranco Garrucha por medio de un pequeño puente.
La ruta va ganando altura, ahora más intensamente, pero siempre sin complicaciones. La pista es ancha y no ofrece dudas! Dejamos una edificación de ganado a nuestra izquierda y seguimos. Las vistas hacia el Estorbín de Valverde son espectaculares!
Continuamos la marcha dejando atrás dos desvíos: el primero se dirige hacia el Pico Brañacaballo y el segundo hacia el Pico Celleros. Comienza a aparecer la nieve, que se acumula en grandes cantidades en la pista por la que vamos.
Llegamos a la altura del Arroyo de Aguazones, donde vemos un bonito salto de agua! seguimos cruzando un pequeño puente de madera, muy bonito.
Encontramos un desvío más, por el que podriamos auparnos a la parte alta de la Sierra del Cuadro por el Collado Sierra Bermejo. De momento, nuestro objetivo es el Estorbín de Valverde, por lo que continuamos con el mismo rumbo sin desviarnos.
El día se antoja caluroso, aunque el sol sigue escondido tras las cimas de nuestra derecha. La ruta sigue en ligero ascenso y volvemos a ser testigos de la actividad del agua. Las cascadas que nos va regalando el arroyo son preciosas!
Tras casi 5 kilómetros de ruta cómoda a lo largo del valle por su orilla derecha, toca cruzar el Arroyo Valle del Cuadro. No existen puentes habilitados, pero el paso es cómodo, a pesar de la intensa humedad de la zona. Una vez cruzado, encontramos un pequeño refugio de pastores, en la zona conocida como Las Brañas.
La ruta va ganando en belleza y la nieve aparece en mayor medida. La cómoda pista forestal desaparece, dando paso a un sendero maquillado por la nieve, por lo que debemos prestar atención para no perder el rumbo correcto. La idea es continuar por el margen izquierdo hasta llegar a la curva que forma el valle que vamos remontando.
En pocos minutos llegamos a dicha curva. El entorno es mágico! En este punto será necesario volver a cruzar el Arroyo Valle del Cuadro, que lo hacemos buscando el mejor paso. La gran cantidad de nieve y la ausencia de sendero hace que debamos pararnos unos segundos para elegir la mejor opción. Mucha nieve venteada, zonas de mayor acumulación y un arroyo que está en su máximo esplendor!
Ya en la otra orilla, de nuevo por el margen derecho, continuamos la ruta por lo que sería la senda estival. Vamos remontando el valle mientras seguimos disfrutando del curso del arroyo, que nos muestra una cascada preciosa!
A partir de aquí, ya nada será cómodo. La nieve es constante y se encuentra bastante transformada, momento en el que no dudamos para prepararnos para afrontar las últimas rampas, a más de 1.700 metros de altitud. En una zona de rocas, tiempo para ponernos los pinchos!
La ascensión hacia el Estorbín de Valverde se realiza por su cara sur. A pesar de haberle dado el sol durante gran parte de la ruta, la nieve se encuentra bastante dura, por lo que vamos avanzando sin problemas. Podrían existir multitud de vías de ascenso, pues toda la pala es bastante similar. Sin embargo, la cornisa que vemos es tremenda, haciendo muy peligroso el acceso a la arista por muchos lugares. Parece que la mejor opción es llegar primero a Estrella de Cuanya, collado que separa la cumbre del Estorbín de Valverde con la cumbre del Cueto Los Barriales.
Vamos ganando metros y seguimos disfrutando de algún salto de agua, escondido entre la gran pala de nieve por la que vamos. Precaución en algún paso, pues el agua corre por debajo! Una mirada atrás nos brinda una espectacular panorámica del valle recorrido!
Afrontamos la última parte de la ascensión al collado, siempre buscando el mejor paso a lo largo de la redondeada ladera. Sin grandes complicaciones, nos vamos aproximando a la arista! La cornisa es temible y no nos acercamos allá donde se muestre más agreste. Incluso vemos indicios de que la cornisa se ha derrumbado en algún punto!
Tras completar los últimos metros con mayor inclinación, fruto de la cornisa indicada, llegamos a Estrella de Cuanya, un collado que nos regala preciosas vistas hacia el norte, hacia Asturias! A nuestra derecha, la cómoda arista hacia el Estorbín de Valverde, hacia donde nos dirigimos!
Afrontamos los últimos metros de ascensión a lo largo de la cómoda arista. La nieve, aún más dura, no ofrece resistencia, y vamos ganando metros rápidamente. Según nos vamos acercando a la cumbre, la arista se va estrechando, dejándonos unos pocos metros de paso. Especial atención aquí! Acceder a la cima en estas condiciones con raquetas de nieve podría ser muy peligroso. Hay mucha nieve, dura, y la cumbre es un tejado. Ladear con raquetas podría resultar muy incómodo y una verdadera temeridad. La utilización de crampones y piolet es fundamental!
Tras casi 7 kilómetros de ascensión, llegamos a la cima del Estorbín de Valverde (2.123 m). La cumbre sólo nos permite ver el bonito buzón metálico. Ni rastro de la cruz de Asturias que también existe. Las vistas desde aquí son sublimes! Una cumbre de bastante altitud y ubicada en una posición privilegiada. Es perfectamente visible el resto de cimas de la Sierra del Cuadro, el Pico Tres Concejos, el Pico Brañacaballo, el Pico Cellón, el Macizo de Ubiña, la Sierra de Gistredo, las Montañas de Babia, las Montañas de Vegarada, las Montañas de San Isidro, el Pico Polvoreda, las Montañas de Gordón, las cumbres más altas de Asturias, aún con nieve, el Macizo del Mampodre, los Picos de Europa… Un buen rato en la cumbre, previa preparación, pues tuvimos que trazar varias repisas para estar de manera cómoda. Una cima que no olvidaremos!
Completada la ruta, toca regresar. La vuelta la podemos realizar siguiendo la línea de cumbres de la Sierra del Cuadro, pero no disponemos del tiempo suficiente, por lo que regresaremos siguiendo nuestra propia huella.
Descendemos sin complicaciones hacia Estrella de Cuanya y comenzamos la bajada por la ladera, teniendo especial precaución en los primeros metros, puesto que la cornisa nos deja una inclinación importante. No dudamos en darnos la vuelta, piolet en mano, para asegurar bien los 3 primeros metros de bajada. Pronto suaviza la cornisa, dejando la inclinación fácil por la que ascendimos.
Vamos perdiendo altura muy rápidamente, ya que la nieve sigue en buen estado. Notamos indicios de que va ablandando, pero aún es por la mañana, así que, siguiendo nuestros pasos, pronto llegamos a las inmediaciones del Arroyo Valle del Cuadro, donde volvemos a cruzar y donde aprovechamos para quitarnos los crampones y afrontar la última parte de la ruta.
El resto de la jornada, a lo largo de la pista forestal por la que completamos la ida. Un día caluroso, perfecto para caminar, y que nos brinda un regreso muy agradecido. Varias miradas atrás para presenciar el Estorbín de Valverde, completamente blanco!
Vamos completando el valle sin mayores complicaciones y en ligero descenso, mientras seguimos disfrutando de los bonitos saltos de agua que nos brinda el agua! Ya tenemos al fondo Tonín de Arbas.
Tras más de 13 kilómetros y casi 6 horas de ruta, llegamos a Tonín de Arbas, donde damos por concluida la jornada.
Conclusión
El Estorbín de Valverde (2.123 m) es una de esas cimas que todo montañero debe subir alguna vez. No importa la época, aunque ascenderla vestida de blanco le da un toque especial. Una altura perfecta para disfrutar de la Cordillera Cantábrica y de los Picos de Europa. Un valle que en primavera se muestra espectacular y un día perfecto para disfrutar de la montaña. Una ruta sublime!
Datos técnicos
Actividad: Alpinismo
Fecha: Jueves, 21 de Marzo de 2019
Duración: 5 h 51 min
Dificultad: Fácil
Distancia: 13,15 km
Recorrido: Ida y Vuelta
Desnivel acumulado: 894 m
Altura mínima: 1.257 m
Altura máxima: 2.131 m
Participantes: Rubén
Método de Información de Excursiones (MIDE):
R&S Wanderlust
Espíritu viajero!
0 comentarios