Fasgar – Sesteadero de Buey de Fraile (1.904 m) – Pico Arcos del Agua (2.063 m) – Peña Cefera (2.012 m) – Llaos de Baucín

Ascender el Pico Arcos del Agua (2.063 m) y recorrer todo el entorno que lo rodea era una de esas rutas pendientes eternas. Por fin llegó el momento de conocer un lugar tan desconocido como espectacular. La idea será coronar tres cimas y visitar dos lugares mágicos: Campo de Santiago y los Llaos de Baucín. Nos espera una jornada de nieve!

Descripción

Antes de empezar a caminar, preparamos la mochila con todo tipo de material invernal. Hay nieve, pero no sabemos cómo se encontrará según vayamos ganando altura. También echamos un vistazo al cartel informativo que existe en la misma plaza, un completo mapa de la zona que nos servirá para hacernos una primera idea de lo que nos encontraremos. También existe una fuente en la que podemos recargar agua y el desvío que debemos tomar, a la altura de un puente sobre el Río Vallegordo, para iniciar la ruta, rumbo a Campo de Santiago.

Cartel informativo

Fuente

Puente sobre el Río Vallegordo

Desvío hacia Campo de Santiago

Comenzamos a dar los primeros pasos después de seguir el desvío. La primera parte de la ruta transita por una ancha y cómoda pista forestal y se dirige hacia el Collado de Campo. Vamos dejando atrás, siendo testigos de pequeñas manchas y restos de nieve. Ha nevado durante los últimos días y no sabemos cuánta nieve encontraremos.

Pronto llegamos a unos carteles informativos sobre el lugar. El día es soleado y vamos avanzando rápidamente.

Carteles informativos

Seguimos avanzando por la pista forestal, sin dificultades ni pérdida. Cruzamos algún puente sobre pequeños arroyos y seguimos un desvío hacia la izquierda, perfectamente señalizado, siempre rumbo a Campo de Santiago, aunque no llegaremos aquí.

Puente

Desvío hacia la izquierda

La pista forestal avanza en ligero ascenso. Empezamos a encontrar nieve! Alguna curva sombría nos deja ver que estaremos ante una ruta con bastante acumulación de nieve. En las zonas sombrías, la última capa de nieve caída, nieve costra, rompe, temiéndonos lo peor. Aguantamos en botas, a pesar de meter la pierna más de la cuenta en muchas ocasiones. Es pronto y, en las zonas soleadas, la nieve aguanta estable. Intentaremos llegar al Collado de Campo!

Ya muy cerca del collado, a mano izquierda, nos sorprende la bonita Fuente La Sed y el Mar!

Fuente La Sed y el Mar

Tras algo más de 3 kilómetros, un poco más exigentes de lo que nos imaginábamos, fruto de la nieve caída en los últimos días, llegamos al Collado de Campo. Desde el collado, las vistas que se nos abren son preciosas! En primer término, hacia abajo, Campo de Santiago, un valle de origen glaciar espectacular. A nuestro alrededor, numerosas cumbres de más de 2.000 metros de altura. Destacan las Torres de Vizbueno, el Pico de la Cernella, el Pico de la Rebeza y La Peñona. A nuestra izquierda, las primeras rampas del Sesteadero de Buey de Fraile, nuestro primer objetivo. Un cartel informativo nos dará todo tipo de información sobre la panorámica que tenemos delante. Tras un breve descanso, disfrutando de las vistas del lugar, continuamos desviándonos hacia la izquierda, rumbo al Sesteadero de Buey de Fraile.

Collado de Campo

Campo de Santiago

Cartel informativo

Desvío hacia el Sesteadero de Buey de Fraile

La siguiente parte de la ruta nos guiará a lo largo del cordal hacia el Pico Arcos del Agua, nuestro principal objetivo. Primero debemos superar las exigentes rampas de la primera cota, donde empezamos a sufrir más de la cuenta por la gran cantidad de nieve. No se encuentra nada transformada, el día es soleado y cuesta mucho avanzar. Incluso en algún tramo metemos la pierna casi entera, por lo que no dudamos que las raquetas serían la mejor opción para avanzar. Parada técnica y continuamos, ahora mucho más cómodos!

Las exigentes rampas del Sesteadero de Buey de Fraile van suavizando conforme vamos llegando a la cumbre. No tiene pérdida, puesto que siempre debemos avanzar por la parte más alta del cordal.

Panorámica hacia la Sierra de Gistredo

En pocos minutos de ascenso, llegamos al Sesteadero de Buey de Fraile (1.904 m). A las vistas que obtuvimos en el collado, sumaremos la presencia de dos de los grandes, el Pico Catoute y Peña Valdiglesia. Hacia el norte, el Alto de la Cañada, el Valle Gordo y gran parte de la Montaña Central Leonesa, montañas de Babia, montañas de Laciana. Estamos en plena Sierra de Gistredo, a buena altura, y eso se nota! Por delante de nosotros, el resto del cordal que seguiremos hacia el Pico Arcos del Agua.

Sesteadero de Buey de Fraile (1.904 m)

Continuamos el trazado por el cordal, perdiendo unos pocos metros hasta un pequeño collado, próximo a la cumbre ya conquistada. El resto, en ascenso hacia el Pico Arcos del Agua. El cordal es ancho y no ofrece ninguna dificultad, perfecto para raquetear! Tan sólo debemos prestar atención a no aproximarnos mucho a la cara este, mucho más agreste, en caso de haber cornisa.

Collado previo a la cumbre del Pico Arcos del Agua

Según vamos avanzando y ganando altura, las vistas van siendo cada vez más espectaculares! Aparecen los impresionantes Llaos de Baucín y Peña Cefera!

Ascendiendo hacia el Pico Arcos del Agua con Peña Cefera al fondo

Cumbre del Pico Arcos del Agua (2.063 m), tras algo más de 6 kilometros de ruta y más de 700 metros de desnivel positivo. Una montaña preciosa y con unas vistas sublimes! Las cimas ya mencionadas del Pico Catoute, Pico de la Cernella, Pico de la Rebeza, Peña Valdiglesia, La Peñona y Alto de la Cañada se antojan cercanas, completamente nevadas y espectaculares! Las vistas de los valles que rodean el Pico Arcos del Agua son preciosas, destacando el valle que se dirige a Campo de Santiago (Omaña) desde Colinas del Campo de Martín Moro Toledano (El Bierzo). Se levanta algo de viento que hace un poco más molesta la cumbre, pero disfrutamos igualmente de la cima conseguida. Fotos y vídeos para llevarnos y seguimos la ruta!

Pico Arcos del Agua (2.063 m)

Rubén en la cumbre del Pico Arcos del Agua

Valle que se dirige desde Colinas del Campo de Martín Moro Toledano hasta Campo de Santiago

Para descender del Pico Arcos del Agua, la opción más sencilla y cómoda sería regresando sobre nuestros pasos. Sin embargo, la más atractiva, sin lugar a dudas, será la que realicemos, haciendo cumbre en Peña Cefera y visitando los Llaos de Baucín. A pesar de ser la más atractiva, con nieve, el descenso es delicado. El objetivo lo tenemos cerca y visible, siendo el collado que nos separa de Peña Cefera, pero el terreno está muy inclinado. El estado de la nieve es crucial para decidir bajar por aquí, así que máxima atención!

Para iniciar la bajada, debemos continuar un poco más a lo largo del cordal, sin perder altura. Cuando el terreno suaviza, un par de diagonales nos dejarán, ya sin pérdida, con el rumbo correcto. Hay mucha nieve acumulada y con raquetas se hace mucha huella. Esto hace que vayamos perdiendo altura sin mayores complicaciones. A pesar de la inclinación, vamos forjando la escalera de bajada! En pocos minutos, llegamos al collado! Con nieve dura, sin lugar a dudas, crampones y piolet.

Collado

Ya en el collado, un vistazo al valle por el que regresaremos, pasando por los Llaos de Baucín. Ahora, turno para Peña Cefera! Las primeras rampas serán las más exigentes, pero la subida irá suavizando hasta llegar a la cumbre, sin mayores complicaciones.

Llegamos a Peña Cefera (2.012 m), cumbre con similares vistas a las anteriores. Lo mejor, la nueva visión del Pico Arcos del Agua, que desde aquí se ve espectacular! Breve parada, alguna foto, y continuamos, desandando hasta el anterior collado.

Peña Cefera (2.012 m)

A pesar de que existen numerosas opciones para bajar de Peña Cefera, nosotros escogemos la más tranquila, que lo hace pasando nuevamente por el collado mencionado. Comenzamos a perder altura en un campo inmaculado de nieve! Sin duda, uno de los mejores momentos de la ruta! Qué belleza!

El terreno es ideal para raquetear y la nieve se encuentra en perfecto estado, por lo que vamos disfrutando muchísimo de la ruta. Un vistazo atrás para contemplar las dos grandes montañas conquistadas!

Peña Cefera y el collado por el que descendimos, muy cerca del entorno de los Llaos de Baucín

Sin grandes complicaciones, llegamos a los Llaos de Baucín, completamente heladas. Espectaculares! El entorno es de ensueño y no dudamos en parar y disfrutar de cada vistazo. El paisaje es sublime!

Llaos de Baucín

Llaos de Baucín con Peña Cefera al fondo

Visitadas las lagunas, continuamos la jornada! La idea es regresar a Fasgar a lo largo de la ruta marcada que se dirige hacia los Llaos de Baucín. Con esta opción de regreso, podemos encontrar dos dificultades: la extensa vegetación cuando no hay nieve y la ausencia de sendero cuando la hay! En cualquier caso, a pesar de no ser un regreso cómodo, llegar a Fasgar no es tarea complicada. Con paciencia, sin problema! En nuestro caso, a pesar de la existencia de nieve, nos ceñimos al sendero estival y pudimos encontrar hitos a lo largo del camino. No todos son muy claros y alguna curva nos puede perder, pero se trata de la mejor opción de regreso, sin lugar a dudas.

El primer tramo desciende a lo largo del curso del Arroyo de Arcos del Agua, aún cubierto de nieve. El segundo tramo, con mucha más vegetación, irá perdiendo altura entre escobas y árboles. Podemos presenciar un pequeño salto de agua y atravesaremos un bonito abedular.

Salto de agua

Abedular

Tras completar esta primera parte, llegamos al Arroyo de Arcos del Agua, que debemos cruzar para continuar con el rumbo correcto. Tras cruzar el arroyo un par de veces, llegamos a senda más clara y cómoda, ya sin complicaciones ni pérdida. Misión cumplida!

Arroyo de Arcos del Agua

Cruzamos el arroyo para continuar por senda más cómoda y fácil de seguir

A lo largo de la senda, tendremos que seguir tres desvíos hacia la izquierda para continuar hacia Fasgar. Cuidado con el primero, ya que es el que abandona la pista por la que vamos y no es muy visible ni se encuenta señalizado. En el último desvío nos quitaremos las raquetas, a unos 1.400 metros de altitud.

Desvío hacia la izquierda

Desvío hacia la izquierda

Desvío en el que nos quitamos las raquetas de nieve

Tras seguir los desvíos, rodeamos a media ladera cruzando un avellanar. Bonito regreso para llegar a Fasgar, ya muy cerca de aquí.

Avellanar cercano a Fasgar

En pocos minutos, tras seguir perdiendo altura cómodamente, llegamos a Fasgar, donde damos por concluida la jornada.

Conclusión

Omaña nunca defrauda! Cumbres de más de 2.000 metros de altura y valles preciosos para ofrecer todo tipo de opciones en primavera. No imaginábamos encontrar tanta nieve, pero fue una sorpresa muy grata! Tres cumbres en raquetas, Sesteadero de Buey de Fraile (1.904 m), Pico Arcos del Agua (2.063 m) y Peña Cefera (2.012 m) para ganar unas vistas de la Sierra de Gistredo privilegiadas, y los Llaos de Baucín, lagunas glaciares espectaculares! Una circular perfecta para disfrutar del entorno de Fasgar!

Datos técnicos

Actividad: Raquetas de Nieve
Fecha: Jueves, 11 de Abril de 2019
Duración: 5 h 56 min
Dificultad: Moderada
Distancia: 11,90 km
Recorrido: Circular
Desnivel acumulado: 771 m
Altura mínima: 1.306 m
Altura máxima: 2.066 m
Participantes: Rubén
Método de Información de Excursiones (MIDE):

Mapa y Track en Wikiloc

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