Las Salas – Peñas Pintas (1.985 m) – Pico Huelde (1.975 m)
En la Sierra de Riaño, las cumbres del Pico Gilbo y del Pico Yordas se llevan los dos primeros puestos, tanto en fama como en número de ascensiones. Son muchos los montañeros que se acercan a dichas montañas para disfrutar de las vistas que ofrecen, y no es para menos. Sin embargo, por porte, altura, dificultad y vistas que ofrece, no podemos excluir Peñas Pintas (1.985 m). Gran mole de roca caliza que se alza como la montaña más imponente de la Sierra de Riaño. Es imposible no girarse y ver la grandeza de Peñas Pintas. Vamos allá!
Inicio
Podemos ascender Peñas Pintas iniciando la ruta en Salamón o en Las Salas, principalmente. Este último pueblo, Las Salas, será el punto de inicio escogido para elevarnos a Peñas Pintas, puesto que se encuentra más cerca de su cara sur, donde tenemos varias vías de ascenso. Dejamos el coche en la plaza central de Las Salas.
Descripción
Antes de empezar a caminar, ya con la mochila preparada, consultamos un mapa de la zona, existente en la misma plaza donde hemos dejado el coche. También podemos coger agua en la fuente que existe aquí mismo.
Iniciamos la marcha a lo largo del pueblo, dirección Riaño, hasta casi el final. A mano izquierda, nos desviamos de la carretera principal para comenzar el ascenso por una pista forestal herbosa.
La ruta no da tregua y siempre iremos en ascenso, en ocasiones muy exigente. La niebla está presente, muy típica de esta zona. Aún así, la previsión es muy buena y seguro que tenemos buen día. Toda esta primera parte avanza a lo largo de un bonito robledal. La niebla nos deja imágenes para el recuerdo!
Con casi 2 kilómetros de ruta, llegamos a la intersección por la que elegiremos el camino de ida y de vuelta. Nos desviamos hacia la izquierda para elegir como vía de ascenso la que pasa por una antigua mina de cobre. Por la derecha regresaremos, a lo largo de un sendero sin complicaciones, más tendido. Ambas opciones nos llevan hasta Las Traviesas, pudiendo elegir cualquiera de las dos.
Seguimos en ligero ascenso, desviándonos un par de veces más, la primera a la derecha y la segunda hacia la mina de cobre. Este último desvío es un poco más complicado de ver, aunque existe algún hito.
Tras desviarnos, en pocos minutos estamos en la mina de cobre, que visitamos, aunque no se puede entrar, hay mucha humedad y se encuentra encharcada.
A partir de aquí, la ruta cambia considerablemente. La cómoda pista forestal que hemos seguido hasta aquí da paso a estrechos y pindios senderos. Para continuar, rodeamos la mina de cobre por el lado izquierdo, remontando entre bloques de roca caliza para llegar a la parte alta de la mina. Desde la parte alta de la mina, sólo debemos seguir ganando altura hasta llegar a Las Traviesas, una gran pradera que recorre toda la cara sur de Peñas Pintas. Empieza a disiparse la niebla, dejando una panorámica espectacular hacia Las Salas.
Las Traviesas es una zona perfecta para tomar un primer respiro, corto, ya que aún queda mucha ascensión. Visitamos un pequeño refugio y echamos un ojo al mapa para ver por dónde ascender. Por la cara sur de Peñas Pintas, existen dos vías principales de ascenso: la que se dirige hacia la cumbre principal y la que se dirige hacia el Pico Huelde. Ambas pueden ser buenas y entretenidas opciones, tanto para subir como para bajar. Nuestra primera idea es subir de manera más directa hacia Peñas Pintas y regresar haciendo cumbre en el Pico Huelde, eligiendo la otra vía para descender. A nuestro juicio, es más fácil la vía que se dirige hacia Peñas Pintas, más al oeste, que la vía que se dirige hacia el Pico Huelde, más al este.
Superadas Las Traviesas y dejando atrás el refugio, comenzamos a ganar altura por la vía más directa a Peñas Pintas, una vía que se encuentra muy bien señalizada. Este primer tramo, de manera diagonal, superará las primeras paredes de roca que vemos. La subida es exigente, pero no tiene complicaciones técnicas.
Completada la primera parte, llegamos a la Majada de Arriba, donde obtenemos una bonita perspectiva hacia el sur, hacia la pequeña Sierra de los Villares. Otro respiro y una mirada hacia arriba para ver por dónde seguir, que parece imposible!
Continuamos la ascensión a lo largo del último tramo, antes de llegar a la cresta. Este último tramo será el más pindio, debiendo usar las manos en algún momento puntual. Una pequeña trepada sin complicaciones y un pequeño paso lateral son ejemplos de lo que nos podemos encontrar. La subida sigue muy bien hitada y vamos ganando altura sin problemas.
Tras completar la subida por la cara sur, llegamos a la cresta de Peñas Pintas. Las vistas, sencillamente, geniales! Mirar hacia el norte es un espectáculo único! A la izquierda, la cumbre principal, Peñas Pintas. A la derecha, el Pico Huelde, que intentaremos subir a a la vuelta!
Iniciamos la marcha por la cresta, rumbo a Peñas Pintas. La primera parte no tiene ninguna dificultad, así que la completamos rápidamente. A continuación, la cresta se afila y nos brinda un par de buenas trepadas, sencillas para gente acostumbrada. La última parte es algo aérea y requiere de cierta atención para continuar. Nada complicado para gente habituada a estos terrenos!
Finalmente, tras casi 1.000 metros de desnivel, llegamos a Peñas Pintas (1.985 m). La cumbre más alta de la Sierra de Riaño y un mirador perfecto hacia una de las zonas más espectaculares de la provincia de León. Distinguimos el cercano Pico Llerenes, el Pico Castaño y los emblemáticos Pico Yordas y Pico Gilbo. El Embalse de Riaño a nuestros pies, los Picos de Europa y la Montaña Palentina a lo lejos, hacia el oeste el Pico Susarón y el espectacular Macizo del Mampodre. Unas vistas de escándalo y que no dudamos en disfrutar durante un buen rato. El día es perfecto!
El día acompaña y nos vemos con mucho ánimo para seguir disfrutando de la montaña, así que nos vamos hacia el Pico Huelde! Para llegar aquí, debemos descender de Peñas Pintas, rumbo al collado que nos separa de la cima central. Destrepamos con el correspondiente cuidado y, en pocos minutos, llegamos al collado. Desde aquí, continuamos por la parte más alta de la cresta y pasando por la cima central, con una espectacular vista de la agreste cara norte de Peñas Pintas. Superada la parte central de la cresta, llega la parte más complicada, donde debemos superar algún destrepe y apoyar las manos para descender hacia el collado que nos separada del Pico Huelde. Toda la cresta se encuentra hitada, aunque apenas tiene pérdida. Mucha atención y tranquilidad para llegar al collado! Por último, afrontamos la parte final del ascenso al Pico Huelde, de frente, sin ninguna complicación y disfrutando de la presencia de varias cabras y machos cabríos. Gran momento!
Después de superar la bonita y entretenida cresta de Peñas Pintas, llegamos al Pico Huelde (1.975 m). Las vistas son similares a las que conseguimos desde Peñas Pintas, con la diferencia de que tendremos una visión mucho más ampliada de la zona que rodea al Pico Gilbo, muy pequeño desde aquí. Es aconsejable avanzar un poco por la arista, con el fin de ganar mejores vistas hacia esta parte. Breve descanso para disfrutar del entorno!
Tras disfrutar de la parte más alta de Peñas Pintas, iniciamos el descenso llegando hasta el collado previo al Pico Huelde. Desde aquí, muy visible, existe un hito al que debemos llegar para iniciar la bajada por la vía más al este de la cara sur de Peñas Pintas.
Desde el hito, comenzamos a descender, primero por una pindia canal rocosa. El uso de las manos será constante, así que vamos perdiendo altura con la debida atención. Superada la canal, continuamos por un marcado sendero hasta llegar a la Majada de Arriba, relativamente cerca del punto por el que pasamos a la ida.
Parece que el descenso no va a tener más complicaciones, pero nada más lejos de la realidad. Llegar a Las Traviesas será lo más complicado de toda la ruta. Vamos perdiendo altura por una cómoda canal, bien señalizada. La cómoda canal se va estrechando y volviendo más rocosa, momento en el que empezamos a usar las manos, debiendo superar dos destrepes, el segundo más delicado que el primero. Existen varias opciones para superar este último paso, por lo que es importante negociar bien el lugar. Abstenerse gente no acostumbrada a este tipo de terrenos!
Superada la parte más complicada, llegamos nuevamente a Las Traviesas, muy cerca del lugar por donde ya pasamos. Para seguir bajando, elegimos la vía más cómoda, siendo un sendero muy pisado que nos dejará en una pista forestal. Encontramos una sima, así que especial atención en época invernal.
Ya en la pista, seguimos un par de desvíos para llegar a zona más boscosa, agradeciendo la sombra que nos brinda.
En ligero descenso, llegamos a una especie de refugio, donde también encontramos una fuente. Breve parada y una mirada atrás para volver a presenciar la magnitud de Peñas Pintas.
Seguimos perdiendo altura cruzando un bonito hayedo. La pista forestal nos dejará, en pocos minutos, en el desvío en el que iniciamos la ruta circular. De nuevo en senda conocida, sólo queda regresar hacia Las Salas, cruzando el robledal.
Cruzado el bosque, llegamos a la altura de la carretera, donde sólo debemos continuar hacia el centro de Las Salas, donde llegamos a la altura del coche y damos por finalizada la ruta.
Conclusión
Espectacular ruta! Peñas Pintas (1.985 m) y el Pico Huelde (1.975 m) dan forma a una montaña de paredes verticales, infranqueable por muchos lugares y que ofrece unas vistas sublimes de la Sierra de Riaño. Un entorno mágico y un trazado lleno de alicientes, muy entretenido y exigente. Fuerte desnivel, en ocasiones técnico y aéreo, pero que será puro disfrute si se está acostumbrado a estos terrenos. Muy recomendable!
Datos técnicos
Actividad: Senderismo
Fecha: Jueves, 12 de Septiembre de 2019
Duración: 5 h 45 min
Dificultad: Difícil
Distancia: 10,21 km
Recorrido: Circular
Desnivel acumulado: 1.036 m
Altura mínima: 1.007 m
Altura máxima: 1.982 m
Participantes: Rubén
Método de Información de Excursiones (MIDE):
R&S Wanderlust
Espíritu viajero!
2 Comentarios
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- Peñas Pintas, tres miradores privilegiados de la montaña de Riaño y Mampodre | El Rincón del Trotamundos - […] natural y disfrutar con todo lo que nos puede aportar, que no será poco. Seguiremos una ruta de unos…
Me ha encantado lo bien que has descrito el itinerario. GRACIAS. Espero que el próximo 2023, si hay salud, caiga. He subido u par de veces al Yordas, al Gilbo y hace 5 días estuve en el Hato y Loto; pero nunca he subido a Peñas Pintas, así que espero sea el próximo verano.
GRACIAS de nuevo, Rubén.
Hola Fermín!
Muchas gracias por tus palabras! Peñas Pintas no tiene nada que envidiar a sus montañas vecinas, bastante más concurridas y sencillas. Es una ascensión que sorprende y que te hará disfrutar de un día espectacular. Sin duda, la Sierra de Riaño es brutal!
Ya me contarás esa futura ascensión!
Saludos!